miércoles, 28 de mayo de 2014

¿Es el ejercicio físico el elixir de la eterna juventud?


 Autor: J. Daniel Tapia Amores

¿ES EL EJERCICIO FÍSICO EL ELIXIR DE LA ETERNA JUVENTUD?

El ejercicio regular ha reconocido beneficios para la salud en relación con la disminución del estrés oxidativo generado por el ejercicio de alta intensidad.

Las reacciones de reducción que implican a oxidantes y antioxidantes juegan un papel clave en muchas de las vías bioquímicas y procesos de biosíntesis y regulación celular a nivel molecular. Si los procesos oxidativos son frecuentes, estos darán lugar al estrés oxidativo. Se dañarán muchas estructuras dando lugar a alteraciones de procesos moleculares. Los lípidos y las proteínas son más sensibles a este daño. La oxidación de lípidos puede generan una degradación de la membrana celular, mientras que la oxidación de proteínas puede dar lugar a un cambio de sus propiedades. Se ha sugerido que los procesos oxidativos acompañan a la inflamación y afectan a su crecimiento.

Esta situación puede conducir a una serie de enfermedades graves tales como tumores. Muchos científicos afirman que el estrés oxidativo provoca muchas condiciones patológicas. Las enzimas y antioxidantes, que son una de las defensas del organismo, pueden impedir los procesos oxidativos.(1)

En diferentes estudios se ha demostrado que la práctica regular de ejercicio físico también puede reducir los procesos oxidativos. Uno de ellos muestra como los niveles de oxidación de proteínas y ADN en reposo disminuyen. También se observó un aumento en la producción de neutrófilos y de su actividad fagocitaria en individuos activos que realizan actividad regular.(2)

Otro estudio se realizó en ratas diabéticas de edad avanzada, de los que se extrae que la práctica de ejercicio a corto plazo mejora el sistema antioxidante.(3)

El entrenamiento combinado de ejercicio aeróbico y fuerza a corto plazo es una actuación eficaz para el tratamiento de las personas con síndrome metabólico, reduciendo el estrés oxidativo.(4)

Se realizó un programa de 8 semanas de entrenamiento de resistencia progresiva en personas no entrenadas, observando que fortalece el sistema defensivo de los eritrocitos contra el daño de los radicales libres y que disminuye el estrés oxidativo.(5)

Encontramos otro estudio en el que participaron 319 mujeres sedentarias que realizaron 4 meses de ejercicio aeróbico con una frecuencia de 150 minutos semanales. Al final del estudio habían reducido sus niveles F2-isoprostanos (productos de la peroxidación del ácido araquidónico) de tal manera que las que tenían niveles más altos fueron las que más bajaron estos niveles.(6)

Existe evidencia más que suficiente para apoyar la intervención de ejercicio físico, en concreto de ejercicio aeróbico de baja intensidad para la reducción del estrés oxidativo producido por la edad.


Hay muchos factores responsables de la disminución de la masa muscular y la fuerza muscular asociada al envejecimiento, a pesar de los mecanismos complejos, multifactoriales que impulsan el proceso de sarcopénica no se entienden claramente. La sarcopenia conduce a una pérdida de fuerza y más tarde a un estado de disminución funcional, deterioro de la movilidad, un mayor riesgo de caídas, y finalmente, un aumento del riesgo de mortalidad. La inactividad física o un nivel de actividad física disminuida, es parte de los mecanismos subyacentes de la sarcopenia y por lo tanto la actividad física puede ser visto como un factor importante para revertir o modificar el desarrollo de esta condición. Se han propuesto varios tratamientos para el tratamiento de esta pérdida de masa muscular y de fuerza, pero no hay duda de que el ejercicio representa el enfoque más importante para su prevención y tratamiento.(7)

Un estudio realizado con mujeres mayores de 75 años que realizaron ejercicio y tomaron aminoácidos encontró mejoras en la fuerza muscular, la velocidad, la masa muscular, observándose menos dificultad para caminar.(8)

Una multitud de estudios demuestran que los programas de ejercicios estructurados que incluyen resistencia progresiva o entrenamiento de la energía, tienen efectos positivos sobre la sarcopenia, pero no concluyen si hay información disponible para la transferencia de resultados funcionales.

Por desgracia, la cohorte de personas mayores es la que tiene el mayor porcentaje de individuos clasificados como inactivos o sedentarios. Por lo tanto, el reto sería conseguir la motivación de las personas mayores para aumentar su nivel de actividad física, así como proporcionar un acceso seguro a los programas de ejercicio.(9)

Un estudio realizado en 3598 hombres mayores de 60 años encuentró relación entre la actividad física y la sarcopenia, en concreto el caminar y la sarcopenia.(10)

En cuanto a la diferencia entre sexos, no encontramos que ninguno de ellos se beneficie más o menos de un programa de entrenamiento de resistencia de tipo genérico. Así que se puede aplicar tanto para las mujeres y los hombres para contrarrestar eficazmente la pérdida de masa y fuerza muscular con el envejecimiento.11

En nuestra pequeña revisión encontramos bastantes artículos que apoyan la utilización del ejercicio físico para la reducción del estrés oxidativo. Igualmente pasa con la prevención y tratamiento de la sarcopenia que se puede reducir con la actividad física.

Concluimos que, la actividad física es un método efectivo para mejorar los efectos producidos por el envejecimiento como son el estrés oxidativo y la sarcopenia.

www.clinica-fisioterapia-j-daniel-tapia-amores.es

REFERENCIAS:
1. Kmiecik B, Skotny A, Batycka M, Wawrzaszek R, Rybak Z. Influence of oxidative stress on tissue regeneration. Polim Med 2013 Jul-Sep;43(3):191-197.

2. Sasaki S, Matsuura T, Takahashi R, Iwasa T, Watanabe H, Shirai K, et al. Effects of regular exercise on neutrophil functions, oxidative stress parameters and antibody responses against 4-hydroxy-2-nonenal adducts in middle aged humans. Exerc Immunol Rev 2013;19:60-71.

3. Rosety-Rodriguez M, Camacho A, Rosety MA, Fornieles G, Diaz AJ, Rosety I, et al. A short-term training program reduced oxidative damage in elderly diabetic rats. Rev Invest Clin 2013 Jul-Aug;65(4):331-335.

4. Eleuterio-Silva MA, Sa da Fonseca LJ, Velloso EP, da Silva Guedes G, Sampaio WO, da Silva WF, et al. Short-term cardiovascular physical programme ameliorates arterial stiffness and decreases oxidative stress in women with metabolic syndrome. J Rehabil Med 2013 Jun;45(6):572-579.

5. Azizbeigi K, Azarbayjani MA, Peeri M, Agha-alinejad H, Stannard S. The effect of progressive resistance training on oxidative stress and antioxidant enzyme activity in erythrocytes in untrained men. Int J Sport Nutr Exerc Metab 2013 Jun;23(3):230-238.

6. Arikawa AY, Thomas W, Gross M, Smith A, Phipps WR, Kurzer MS, et al. Aerobic training reduces systemic oxidative stress in young women with elevated levels of F2-isoprostanes. Contemp Clin Trials 2013 Mar;34(2):212-217.

7. Montero-Fernandez N, Serra-Rexach JA. Role of exercise on sarcopenia in the
José Daniel Tapia Amores- Fisioterapeuta
elderly. Eur J Phys Rehabil Med 2013 Feb;49(1):131-143.

8. Kim HK, Suzuki T, Saito K, Yoshida H, Kobayashi H, Kato H, et al. Effects of exercise and amino acid supplementation on body composition and physical function in community-dwelling elderly Japanese sarcopenic women: a randomized controlled trial. J Am Geriatr Soc 2012 Jan;60(1):16-23.

9. Freiberger E, Sieber C, Pfeifer K. Physical activity, exercise, and sarcopenia - future challenges. Wien Med Wochenschr 2011 Sep;161(17-18):416-425.

10. Kim SH, Kim TH, Hwang HJ. The relationship of physical activity (PA) and walking with sarcopenia in Korean males aged 60 years and older using the Fourth Korean National Health and Nutrition Examination Survey (KNHANES IV-2, 3), 2008-2009. Arch Gerontol Geriatr 2013 May-Jun;56(3):472-477.

11. Leenders M, Verdijk LB, van der Hoeven L, van Kranenburg J, Nilwik R, van Loon LJ. Elderly men and women benefit equally from prolonged resistance-type exercise training. J Gerontol A Biol Sci Med Sci 2013 Jul;68(7):769-779.